El sistema PURIKOR de ósmosis inversa, utiliza técnicas avanzadas para entregar agua saludable y obtener un buen sabor. La parte central de la unidad es la membrana de ósmosis inversa con una capacidad de filtración de 0.001 micrones que remueve bacterias, metales pesados, sal, sustancias minerales dañinas y otras sustancias químicas disueltas en el agua.
- Rango de temperatura del agua: 4 - 52°C
- Rango de presión de entrada: 15 - 80 psi (1 - 5.6kg/cm²)
- Micras nominales: 5
- Flujo nominal: 400 gpd
- Micras membrana : 0.001
- Consumo de bomba: 48 - 96 watts
- Luz UV potencia: 6 watts
- Luz UV (Fases x Voltaje): 1 X 115
- Máxima cantidad de sólidos disueltos: 800 ppm
- Conexiones: 1/2" hembra, 1/2 macho y 1/4" tubing
- Volumen del tanque: N/A
- Número de etapas de filtración: 6
- Dimensiones: 52 x 41 x 22 cm
- Peso: 14.8 kg
- Asegúrate de que las conexiones de entrada y salida del agua estén bien ajustadas. El sistema se instala generalmente debajo del fregadero o en una ubicación adecuada para acceder a agua potable purificada.
- Coloca el tanque de almacenamiento en una superficie plana cerca del sistema y conéctalo correctamente para recibir el agua filtrada.
- El sistema PKRO400-6UVP cuenta con una lámpara UV que elimina bacterias y virus.
- Asegúrate de que la lámpara esté bien conectada y que su tiempo de funcionamiento esté programado según el manual.
- El agua purificada estará disponible directamente desde el grifo del sistema de ósmosis inversa.
- El agua pasará por varias etapas de filtración, incluida la membrana de ósmosis inversa, el filtro de carbón, y finalmente la lámpara UV para una purificación completa.
- El agua purificada se almacena en el tanque hasta que se necesite, permitiendo tener una reserva lista para usar.
- Después de la instalación, deja correr el sistema durante unas horas o al menos 2-3 ciclos completos para desechar el primer lote de agua. Esto asegura que se eliminen los residuos de los filtros nuevos y se limpia el sistema antes de usarlo.
- Lava el tanque de almacenamiento al menos una vez al año para evitar la acumulación de bacterias o sedimentos.
- Revisa periódicamente las conexiones y juntas del sistema para asegurarte de que no haya fugas.
- Asegúrate de que la lámpara UV funcione correctamente. Si la luz indicadora no está activa, verifica o reemplaza la lámpara.
- Si notas una disminución en el flujo del agua, revisa los filtros, ya que podrían estar obstruidos y necesitar reemplazo.
- El sistema necesita una presión de agua adecuada (generalmente entre 40-80 psi). Si la presión es demasiado baja, considera usar una bomba de refuerzo para garantizar el rendimiento del sistema.
- Si el sistema no se va a utilizar por un período prolongado (por ejemplo, durante vacaciones), asegúrate de cerrar el suministro de agua y drenar el sistema para evitar que el agua estancada dañe los filtros o la membrana.
- Algunos sistemas cuentan con una función de autolimpieza o enjuague de la membrana. Revisa el manual para activar esta función y prolongar la vida útil de los componentes.